Arquitecto y urbanista, pero paisajista en muchas de sus obras, nos abre las puertas de su propio jardín.
El paisajista Guillermo Benitez Cruz abrió un vivero de herbáceas en Capilla del Señor (Buenos Aires). Hoy se dedica especialmente a este tipo de plantas
Nuestra percepción suele ser distinta bajo la influencia de algunos perfumes. Así, por ejemplo, al paisaje podemos sentirlo más alegre, algo sedante, intenso o voluptuoso según los aromas de las plantas que están en flor. Y muchas veces, para descubrir las flores fragantes hay que levantar la vista, ya que residen en las copas de los árboles
Es primavera. Todo brilla y se llena de un mágico colorido, que nos sensibiliza el cuerpo y el alma. Los viveros son una fiesta de colores, las exposiciones de paisajismo y decoración se suceden unas a otras con buenas propuestas y la gente se desliza por ellas con caras sonrientes y captando ideas novedosas (Columna del ing agrónomo Eduardo Stafforini)
Mariela Schaer (paisajista) / Nicolás Heinen (paisajista)